Por Nacho Palou — 12 de Septiembre de 2005
España y Nueva Zelanda son de los pocos casos que hay en los que dos países son antípodas directos. Es decir, que si en el centro de la península Ibérica penetrases la tierra al estilo de la película El Nucleo (The Core) pero sin detenerte en el centro te acabrías llevando por delante algunos hobbits.
Google Maps también sirve para comprobarlo: Si excavase un agujero muy profundo, ¿dónde iría a parar?