El escritor alemán Heinrich von Kleist fue el primero en sugerir el uso de cohetes para entregar el correo en un artículo publicado en octubre de 1810, en el que proponía el uso de baterías de artillería para disparar proyectiles llenos de cartas que sólo necesitarían medio día para cubrir una distancia de unos 300 km. Más tarde se utilizaron cohetes para enviar el correo a Tonga, pero aquellos cohetes no resultaban muy fiables.
En los años siguientes varios países siguieron explorando la posibilidad de utilizar disintos tipos de cohetes para enviar correo entre diferentes zonas y distancias, hasta hace relativamente poco.
En los años 50 un cohete cargado de correo podía atravesar el Atlántico en un día. En 1959 la Marina de EE UU cambió la carga nuclear de un misil Regulus por contenedores del servicio postal. El misil, lanzado desde un avión, recorrió la distancia entre Nueva Jersey y Florida (~1500 km) en 22 minutos.