TRON: Legacy

TRON: Legacy de Joseph Kosinski. Con Jeff Bridges, Garrett Hediund, Olivia Wilde y Bruce Boxleitner. Web oficial: Tron Legacy.

Hay que verla. La secuela de Tron, la tercera mejor película geek de la historia según nuestros lectores, es de visita obligada estos días. Pero, lo mejor de todo, es que es una secuela más que digna, un largometraje con su propia historia, un encaje perfecto con la película original y una utilización de los efectos visuales impresionante, no tan revolucionaria como la peli de 1982 lógicamente, pero bien resuelta.

Con un montón de toques entrañables, pone un poco la piel de gallina volver a ver a Jeff «Lebowski» Bridges en el papel de Flynn, tanto con su edad actual y rollo zen a lo Yoda como con treinta años menos rejuvenecido gracias a técnicas gráficas bastante logradas. Olivia Wilde le pone el toque sexy al asunto y el resto es una sucesión de lo que cabría esperar: peleas a lo Matrix, carreras de motos como nunca hubiéramos imaginado y alguna que otra sorpresa.

Quienes se pregunten si merece la pena ver la versión normal o la 3-D deberían decantarse por la 3-D, estuve leyendo bastante al respecto antes de decidirme. Al parecer la tecnología empleada en Tron: Legacy está un pasito por delante de la de Avatar, pero más interesante resulta todavía la utilización inteligente del 3-D sólo en las secuencias «dentro de la Red», un poco en homenaje a El mago de Oz – que por cierto no es el único que hay a otras películas míticas del género de la ficción y la fantasía.