Cuando el presidente Trump decidió retirar la candidatura de Jared Isaacman al puesto de director de la NASA su administración dijo que pasarían meses antes de que se produjera un nuevo nombramiento. Pero de forma un poco sorpresiva ha decidido retirar del puesto de directora interina a Janet Petro y colocar en su lugar a Sean Duffy, el actual secretario de Transporte.
En palabras (y mayúsculas) de Trump:
Me complace anunciar que voy a encargar a nuestro GRAN Secretario de Transportes, Sean Duffy, que sea Administrador Interino de la NASA. Sean está haciendo un trabajo TREMENDO en el manejo de los Asuntos de Transporte de nuestro País, incluyendo la creación de un sistema de Control de Tráfico Aéreo de última generación, mientras que al mismo tiempo reconstruye nuestras carreteras y puentes, haciéndolos eficientes, y hermosos, de nuevo. Será un líder fantástico de la cada vez más importante Agencia Espacial, aunque solo sea por un breve periodo de tiempo.
Así que en realidad seguimos sin saber cuándo va a presentar una nueva candidatura para que alguien ocupe el puesto de forma permanente. A Janet Petro la había nombrado directora interina el pasado 20 de enero, al posesión como presidente. Sin que Bill Nelson, el anterior director de la agencia, nombrado por Jes Biden, llegara a dimitir. Simplemente su nombramiento se extinguió al terminar la administración Biden.
La elección de Duffy es un tanto sorprendente porque no tiene experiencia en el campo. Aunque por otra parte eso nunca ha demostrado ser una cuestión demasiado importante para Trump, que en realidad da mucha más importancia a que aquellas personas que nombra para ocupar puestos de importancia le demuestren fidelidad.
Con lo que está por ver cómo se desempeña y por cuánto tiempo tendrá que hacerlo. Sin olvidar que sigue siendo del secretario de Transporte, puesto que tiene una carga de trabajo considerable.
Y mientras sigue el peloteo entre el Congreso, el Senado, y la administración en lo que se refiere al enorme recorte al presupuesto de la agencia, en especial a lo que se refiere a su división de ciencia, que Trump ha propuesto. El Cnogreso y el Senado están preparando cada uno una contrapropuesta que tendrán que consensuar antes de mandarla a la Casa Blanca. La versión más reciente que maneja el Senado, por ejemplo, no sólo no acepta los recortes sino que aumenta el presupuesto de la agencia. Aunque supongo que saben que eso no va a pasar y que como van a tener que pactar van a una propuesta de máximos que les dé margen de maniobra.
Aunque está por ver si todo este proceso termina antes de que algunas misiones científicas se queden sin dinero ya no por los recortes sino porque sin presupuesto para la NASA aprobado terminarán por quedarse sin fondos aunque no hayan sido objeto del tijeretazo.
El tijeretazo es tan preocupante que todas las personas que aún viven que han ocupado en algún momento la dirección científica de la agencia han firmado una carta que solicita al Congreso que no se lleven a cabo. Con independencia de si sirvieron bajo un presidente demócrata o republicano.
Pero pase lo que pase con el presupuesto al final ya será tarde para las 2.145 que ocupan puestos de alto nivel en la agencia y que han aceptado dejarla mediante jubilaciones anticipadas o indemnizaciones. A las que hay que sumar algo más de 500 personas más de otros niveles que también van a dejar la agencia. Eso es como un 14 % de reducción de plantilla que no sólo supondrá más carga de trabajo para quienes permanezcan en la agencia sino, y sobre todo, supone una pérdida de experiencia que a ver cómo se puede gestionar.