Por @Wicho — 24 de Marzo de 2023


La primera etapa de la misión The Beat Goes On de una pieza en el agua – Rocket Lab

Aunque al principio el cohete Electrón de Rocket Lab no iba a ser reutilizable en marzo de 2021 la empresa anunció que había cambiado de planes. Y que para ello iba a intentar pescar las primeras etapas en el aire mientras descendían colgadas de un paracaídas. Pero eso ha demostrado ser más complicado de lo que ya parecía. Y además resulta que es relativamente sencillo reacondicionar una primera etapa que ha amerizado. Así que a partir de ahora el plan es recuperarlas de la superficie del mar.

La primera vez que el helicóptero de Rocket Lab intentó pescar una primera etapa en una misión real consiguió engancharla. Pero al piloto no le convenció cómo se movía una vez colgada de la eslinga, así que terminó por soltarla para que siguiera su descenso al mar.

La segunda vez que lo intentaron se perdió la telemetría que indicaba la posición de la primera etapa. Así que, tal y como indican los protocolos de seguridad, el helicóptero se dio el piro por si acaso. Con lo que esa primera etapa también terminó en el agua.

Las dos fueron recuperadas por el Seaworker y luego llevadas de vuelta a las instalaciones de la empresa. Donde descubrieron que tampoco se habían visto tan perjudicadas por su baño. De hecho un motor Rutherford pasado por agua funcionó perfectamente una vez reacondicionado.

Así que han decidido que en vez de seguir adelante con lo del helicóptero lo que harán es impermeabilizar mejor las primeras etapas para facilitar el trabajo de reacondicionamiento.


La primera etapa de la misión Return To Sender de una pieza en el agua – Rocket Lab

Y la misión The Beat Goes On, lanzada con éxito hace unas horas desde el Complejo de lanzamiento 1 de la empresa en Nueva Zelanda, es la primera en la que han aplicado eso.

Fue el lanzamiento número 35 de un Electrón, tan sólo siete días y unas pocas horas después del anterior, lo que es un récord de velocidad entre lanzamientos para la empresa, que parece que va cogiendo ritmo y se está convirtiendo en el SpaceX de los lanzamientos ligeros. Fue también el vigésimo quinto intento de lanzamiento orbital de la industria espacial estadounidense en 2023, y el número 45 en todo el mundo desde 14 emplazamientos diferentes.

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