Por @Wicho

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Jared Isaacman durante su comparecencia ante el Comité de Comercio, Ciencia y Transporte del Senado el pasado mes de abril - NASA/Bill Ingalls

Siempre he dicho que no me gustaba Jared Isaacman como posible director de la NASA. Pero ahora ya nunca sabremos si lo hubiera hecho bien, mal, regular, o de ninguna otra manera porque la administración Trump ha retirado su candidatura. Si no me equivoco, es la primera vez en la historia de la agencia que sucede una cosa así.

A mí Isaacman, que tiene unas credenciales impresionantes como aero y espaciotrastornado, pues sin ir más lejos es tiene un grado en aeronáutica y es un experimentado piloto, con más de 7.000 horas de vuelo en aviones de varios tipos, no me convencía porque tengo mis dudas de que tuviera lo que hay que tener para manejarse en el entorno altamente politizado que rodea las decisiones que atañen a la agencia.

Además, me parecía un candidato demasiado próximo a Elon Musk, pues Isaacman ha pagado ya de su bolsillo las misiones espaciales tripuladas Inspiration4 y Polaris Dawn, ambas voladas en sendas Crew Dragon de SpaceX. Así que tampoco tenía nada claro que fuera a ser capaz de pararle los pies a las ideas más descabelladas de Musk y, por ende, de Trump.

Sin embargo el proceso para su nombramiento estaba discurriendo sin mayores problemas. Y es que a fin de cuentas, teniendo en cuenta el nivel de los otros nombramientos de la administración Trump, Isaacman estaba claramente por encima de la media.

Pero tiene toda la pinta de que la ruptura del idilio entre Musk y Trump ha contribuido a llevarse por delante la candidatura de Isaacman. Que sí, que se supone que Musk ha dejado su papel en el gobierno de Trump porque se ha terminado el tiempo que el contrato que tenía le permitía estar asociado a él. Pero si Trump hubiera querido se habría pasado por el forro de sus caprichos esa limitación. A fin de cuentas sólo se trataría de una pequeña ilegalidad cuando prácticamente a diario está tomando decisiones de dudosa constitucionalidad.

Probablemente también haya ayudado que el círculo más íntimo de Trump no ve a Isaacman lo suficientemente MAGA. De hecho Isaacman, en respuestas escritas a preguntas de miembros de la Comisión de Comercio del Senado el pasado mes de abril, durante el proceso previo a su ratificación como director de la NASA, dijo que si bien no estaba tomando parte en las discusiones sobre el presupuesto de la agencia, los recortes propuestos, que alcanzan casi un 50% en el caso de la división de ciencia, «no parecían un resultado óptimo.» Y eso por no hablar de que en su momento hizo donaciones al partido demócrata.

Todo eso encaja con estas declaraciones de Liz Huston, una portavoz de la Casa Blanca, decía esto sobre la decisión de retirar la candidatura:

El director de la NASA ayudará a llevar a la humanidad al espacio y a ejecutar la audaz misión del Presidente Trump de plantar la bandera estadounidense en el planeta Marte. Es esencial que el próximo líder de la NASA esté en completa alineación con la agenda América Primero del presidente Trump y un reemplazo será anunciado directamente por el presidente Trump pronto.

La respuesta de Isaacman ha sido esta:

Estoy increíblemente agradecido al Presidente Trump, el Senado y a todos los que me han apoyado a lo largo de este viaje. Los últimos seis meses han sido esclarecedores y, sinceramente, un tanto excitantes. He adquirido una apreciación mucho más profunda de las complejidades del gobierno y del peso que soportan nuestros líderes políticos.

Puede que no siempre sea obvio a través del ruido y la turbulencia, pero hay muchas personas competentes y dedicadas que aman a este país y se preocupan profundamente por la misión. Esto quedó patente durante mi audiencia, en la que los líderes de ambos bandos dejaron claro que están dispuestos a luchar por la agencia espacial con más logros del mundo.

El Presidente, la NASA y el pueblo estadounidense se merecen lo mejor: un Administrador dispuesto a reorganizar, reconstruir y movilizar a los mejores y más brillantes cerebros para conseguir los avances revolucionarios que cambiarán el mundo y para cuya creación se creó la NASA.

No he volado mi última misión, sea cual sea la forma que adopte en última instancia, pero sigo siendo increíblemente optimista y creo que la humanidad tiene por delante sus mejores días en el espacio. Siempre estaré agradecido por esta oportunidad y animaré a nuestro Presidente y a la NASA mientras nos guían en la mayor aventura de la historia de la humanidad.

Eliminado Isaacman del tablero de juego, y mientras esperamos a ver quién lo sustituye, nominación que probablemente validará una vez más aquello de que otro vendrá que bueno me hará, la administración Trump sigue adelante con su idea de meter un enorme tijeretazo al presupuesto de la NASA, con una lista de misiones que serían eliminadas da miedo.

Sin embargo, la Casa Blanca no decide el presupuesto de la NASA, sino que son el Congreso y en Senado los que tienen la última palabra. Así que toca negociar. Claro que viendo la durísima oposición que están mostrando a las decisiones más polémicas y dudosas de Trump, el asunto no tiene muy buena pinta.

Salvo que todas esas misiones que Trump quieres cargarse suponen dinero y puestos de trabajo en los estados por los que han sido escogidos esos congresistas y senadores que tienen que pararle los pies –o no– a Trump. Y ese dinero y esos puestos de trabajo se traducen en votos de cara a una futura reelección. Así que aunque sólo sea por eso, a ver qué pasa.

Pero dese luego no corren buenos tiempos para la NASA. Ni, en general, para los Estados Unidos. Y no tiene mucha pinta de que la situación vaya a mejorar a corto plazo.

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Por @Wicho

Hace unos minutos ha terminado la misión NS-31 del cohete New Shepard de Blue Origin. La empresa lo está vendiendo como un vuelo histórico al ser la primera vez que una nave va al espacio con una tripulación compuesta sólo por mujeres tras la misión de Valentina Tereshkova en 1963.

Pero a mí, desde que tuve noticia de la existencia de esta misión, me ha parecido y me sigue pareciendo un gran ejercicio de purplewashing por parte de la empresa de Jeff Bezos.

Y es que, sin querer desmerecer los méritos de Aisha Bowe, Amanda Nguyen, Gayle King, Katy Perry, Kerianne Flynn o Lauren Sánchez, lo único que han necesitado para poder ir al espacio es haber entrado en el radar de Lauren Sánchez, que es quien ha estado al frente de la organización de la misión y por cosas de la vida resulta que es la pareja de Jeff Bezos, para que las invitara.

Foto de grupo hecha en un estudio de las seis con sus monos de vuelo
De izquierda a derecha Gayle King, Aisha Bowe, Lauren Sánchez, Amanda Nguyễn, Katy Perry y Kerianne Flynn - Blue Origin

No han necesitado años y años de formación y entrenamiento, como ha sido el caso de la ya citada Valentina Tereshkova y de las mujeres que la siguieron como astronautas profesionales. Comparar sus viajes al espacio me parece bastante ridículo.

De hecho, las seis de la NS-31 viajaban como podemos viajar en un avión cualquier día: como meras pasajeras, sin capacidad alguna de intervenir en el desarrollo de la misión. Todo a bordo de la cápsula es automático. Es como si me dicen que llenar un avión de mujeres contribuye a animar a mujeres a convertirse en pilotos de aerolínea.

Y sí, Wally Funk también voló invitada al espacio en la primera misión tripulada de un New Shepard. Pero tenía toda una carrera detrás relacionada con la presencia de las mujeres en la industria aeroespacial que la hacía más que merecedora de esta tardía recompensa.

La cápsula, en cualquier caso, alcanzó los 107 kilómetros sobre el nivel del mar, con lo que, aunque sólo haya sido por unos minutos, pues la misión ha durado diez minutos y 21 segundos, las seis han estado en el espacio y en caída libre, viendo nuestro planeta contra la oscuridad del espacio. Así que que no pongo demasiado en duda que esta experiencia vaya a servir para dar una nueva perspectiva a las seis «para inspirar a generaciones futuras». Tiene que ser una pasada.

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Por @Wicho

Le estuve echando un ojo a la comparecencia de Jared Isaacman frente al Comité de Comercio del Senado de los Estados Unidos de cara a su nombramiento como director de la NASA. Como era de esperar, supongo, ha prometido la Luna, Marte y lo que haga falta a los senadores que lo entrevistaron. Así que no creo que tenga ningún problema a la hora de conseguir el puesto.

Pero aunque creo que es la persona con mejores cualificaciones de todas las que ha nombrado o propuesto Trump para altos cargos en su segundo mandato también creo que no es la persona adecuada para el puesto.

Seguir leyendo: «Jared Isaacman promete la Luna, Marte y lo que haga falta para que lo nombren director de la NASA y eso no va a ser bueno»

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Por @Alvy

Facebook e Instagram dejarán de utilizar verificadores de datos profesionales y se encomendarán a la comunidad

Una de las noticias de hoy fue que Instagram y Facebook eliminan a los verificadores de datos, rememorando a lo que hizo X/Twitter tras ser adquirida por Elon Musk. En principio es en Estados Unidos, pero se extenderá a otros países. En España afectaría directamente a la labor de Newtral y a Maldita.es y EFE, aunque también a empresas de todo el mundo de la International Fact-Checking Network (IFCN).

Según parece la idea será reemplazar esa verificación humana por «notas de la comunidad» al estilo X. Que en teoría es algo que suena bien (cómo decir que no a «una herramienta colaborativa para añadir contexto útil a los posts»)… pero que por otro lado resulta fácilmente manipulable, especialmente en los temas más polarizados y controvertidos. Más o menos como todos los sitios en los que la comunidad tiene «voto», que acaban con sesgos, manipulaciones y censuras de todo tipo de las que es difícil responsabilizar a nadie.

Si no te gusta la realidad, redefínela como mejor te apetezca. Parece un poco el mensaje de fondo del asunto, que en vez de información en forma de hechos y datos verificables por cualquiera –labor supervisada por profesionales que se dedican a eso– basta con que alguien, ya sea un ser humano, un grupito conchavado o un ejército de bots, haga un clic en «me gusta» o «no me gusta» para enterrar noticias con las que se esté en desacuerdo… o dar alas a sus filias favoritas, por raras o erróneas que sean. Y así, queridos niños, es como se define esa nueva realidad.

Se vienen tiempos interesantes.

Meme de Los Simpson: las hordas enfadadas

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