Por @Wicho

Cruce de cables 34 (26 de abril de 2025)

Una cabeza en tonos de azul oscuro con unas líneas rojas superpuestas como si estuvieran haciendo un mapa 3D de ellaPlanespotting [~17:15] – David me ha dejado liarlo y en este Cruce de cables hablo del planespotting, esa afición mía a hacer fotos de aviones que quizás nunca hubiera salido a la luz de no ser por ciertos vuelos a Guantánamo de dudosa legalidad. Pero por supuesto con un enfoque tecnológico ya que hablo de algunas webs útiles para ello y de cámaras y objetivos.

  • Todo esto viene del Real Cuerpo de Observadores, un grupo de civiles que durante la Segunda Guerra Mundial tenía como tarea intentar detectar la aproximación de aviones enemigos al Reino Unido usando sus oídos y unos prismáticos. Sí, había radar pero aún era imperfecto y no cubría todo el espacio necesario.
  • Algunos le cogieron el gusto y terminada la guerra siguieron observando aviones por afición. De hecho aún hay planespotters que con unos prismáticos y una libreta toman nota de la matrícula de los aviones que ven.
  • Otros, yo diría que la mayoría, nos dedicamos a hacerles fotos –o vídeos– y luego ya guardamos los archivos con datos acerca del aeropuerto, la matrícula, etc.
  • Un primer paso cuando vas a ir a hacer spotting aun aeropuerto que no conoces es consultar la guía correspondiente de Spotterguide.net.
  • Eso te permite localizar los puntos de spotting recomendados. Y acto seguido, gracias a Photo Ephemeris puedes ver las condiciones de iluminación en cada uno. Así podrás saber cuales estarán a contraluz a según qué hora y planificar tus desplazamientos.
  • Google Maps o similar es la herramienta que utilizo para eso.
  • Otro recurso imprescindible es Flightradar24. Ahí puedes ver los patrones de movimiento del aeropuerto y descargarte listas de llegadas y salidas. Si te lo llevas en el móvil, tendrás toda la información necesaria en el bolsillo mientras haces las fotos.
  • Menos importante hoy en día me parece la cámara. Yo uso fundamentalmente una Canon EOS 5D Mark III, aunque también tengo una Canon EOS 7D por si hace falta utilizar dos objetivos sin perder el tiempo de cambiarlos. La 5D es de 2012; la 7D de 2009. Pero creo que prácticamente cualquier cámara actual tendrá un sistema de autofoco lo suficientemente competente, además de una calidad de imagen más que adecuada. En especial en mi caso que no dejo de ser un aerotrastornado más que usa esas fotos como fondo de escritorio.
  • En este sentido me parece mucho más importante el objetivo, que es el que realmente determinará la calidad de imagen. Mi objetivo habitual para estas cosas es un Canon EF 100-400MM F/4.5-5.6L IS USM, ya descatalogado. La versión actual es el EF 100-400mm f/4.5-5.6L IS II USM. Si llevo otro, normalmente es el Canon EF 24-105mm f4L IS USM.

Por cierto, de lo que es el planespotting también tengo una charla de, literalmente, cinco minutos.

_____
Cada semana grabamos con David Sierra en el distendido ambiente de Cruce de Cables, el programa de Radio Nacional de España, como colaboradores habituales. Se emite en RNE los sábados de 03:00 a 04:00.

Relacionado:

Compartir en Flipboard Publicar
PUBLICIDAD


Por @Wicho

Cuando hablo de los orígenes de esa afición mía –y de muchas más personas, ojo– por el planespotting siempre menciono al Cuerpo Real de Observadores que durante la Segunda Guerra Mundial actuó en el Reino Unido para detectar de oído y de ojo la aproximación de aviones enemigos. Pero lo que no sabía hasta hoy es que en los Países Bajos hubo un cuerpo similar que operó durante la Guerra Fría desde edificios y lugares altos y desde unas torres de hormigón construidas a propósito para ello, las luchtwachttoren. El enlace está en neerlandés pero Chrome o DeepL te lo traducen sin problema.

La idea era que voluntarios del Cuerpo de Vigilancia Aérea (KLD) detectaran aviones enemigos volando a baja altura, por debajo de la cobertura del radar, y que informaran de ello a las fuerzas armadas del país. De hecho el servicio formaba parte del Comando de Defensa Aérea de la Real Fuerza Aérea de los Países Bajos.

Para ello se colocaban en puesto situados en molinos u otros edificios altos –cabe recordar que los Países Bajos apenas tienen ningún lugar elevado– o bien en las ya citadas luchtwachttoren, construidas a tal efecto. En total llegó a haber 276 puestos de observación, la mitad de ellos en estas torres.

Se construían a partir de unos módulos de hormigón prefabricados que se unían con pernos para dar a cada torre la altura necesaria en incrementos de 1,14 metros, que era la altura de tres módulos. Como una especie de Lego pero a lo bestia. Así, las hubo desde cuatro hasta 32,5 metros de altura.

En la parte alta montaban una plataforma de 3×3 metros en la que se situaba un pequeño refugio para los dos observadores y en cuya parte central había montados unos prismáticos y una mira colocados sobre un plano de la zona convenientemente orientado según los puntos cardinales.

Dos miembros del KLD en acción en una foto en blanco y negro de la época
Luchtwachtters en acción

La idea era que los observadores localizaran de oído los aviones y que con los prismáticos pudieran luego identificar el tipo de avión. El plano les permitía saber por dónde andaban. Las torres operaban de tres en tres –a veces de cuatro en cuatro– para triangular la posición de los aviones.

Empezaron a ser construidas en otoño de 1951 y la última fue completada a finales de la década. Pero con el tiempo los avances en la tecnología de radar y la aparición de los aviones a reacción las habían vuelto obsoletas, así que en 1968 el KLD fue disuelto y las torres dejaron de ser utilizadas.

De hecho sólo se sabe de una ocasión en la que detectaran algo cuando en 1958, la torre de Linne, cerca de Montfort, avistó un avión que había participado en un festival aéreo en Francia y se había desviado deliberadamente de su curso en su camino de regreso a la Unión Soviética para fotografiar una parte de la zona fronteriza.

Hoy en día quedan 17 de ellas, junto con otras dos más construidas en ladrillo. Algunas de ellas tienen estatus de monumento protegido. Y hay incluso algunas, como por ejemplo la Luchtwachttoren 701 del vídeo de arriba, situada en Warfhuizen, que han sido restauradas a su estado original. La 7X3, en Hees, está siendo restaurada.

Planespotting y brutalismo en el mismo paquete, ¡qué más se puede pedir!

Las descubrí en una publicación de Matt Steinglas en Bluesky gracias a la etiqueta #brutalism.

Compartir en Flipboard Publicar
PUBLICIDAD


Por @Wicho

Foto del avión en el interior de un hangar con un montón de personas de espaldas en primer plano
Presentación pública del avión en el aeropuerto de Schiphol - Corendon

Corendon Dutch Airlines acaba de presentar en público Sweet Louise, un avión «tatuado». La nota de prensa dice que es para celebrar el 25 aniversario de la fundación de Corendon, de la que es filial. Pero la aerolínea fue fundada en 2004 y comenzó a volar en abril de 2005, así que sospecho que o bien a alguien se le ha escapado un número o bien alguien ha echado mal las cuentas. O a lo mejor es que trabajan con muuuuuuuucha previsión.

En cualquier caso se trata del Boeing 737 MAX 9 con matrícula PH-CDQ, entregado a la aerolínea el 15 de noviembre de 2023 y que hasta ahora volaba con la librea estándar de la aerolínea. En Flightradar24 le puedes seguir la pista para saber dónde verlo.

El diseño, basado en símbolos náuticos clásicos, es un homenaje en forma de tatuaje a los viajes. Es del por lo visto muy conocido tatuador Henk Schiffmacher, quien ha aplicado su arte a Lady Gaga o Kurt Cobain, por ejemplo.

Según él mismo:

El diseño es un homenaje al viajero. El tatuaje en el motor representa a un pirata, el eterno vagabundo de los mares, transformado para Corendon en un símbolo con forma de corazón. Los tatuajes cuentan historias, y este refleja mis años viajando por el mundo y conectando con personas de todos los ámbitos. Simboliza el movimiento, la conexión y el deseo de explorar. Me enorgullece que ahora surcará los cielos.

El nombre del avión es un homenaje a la esposa de Schiffmacher.

Igual ahora me puedo llevar a mi amiga Esther a hacer planespotting.

Relacionado,

Compartir en Flipboard Publicar
PUBLICIDAD


Por @Wicho

Ya hace algún tiempo que se sabían las fechas, pero hoy hemos empezado a ver el programa del festival aéreo Aire 25, que se celebrará los próximos 14 y 15 de junio en San Javier, Murcia. El día 14 estará dedicado a la exhibición estática y a los ensayos. El 15 tendrá lugar el festival aéreo propiamente dicho.

La lista de participantes, por ahora, y tal y como está publicada en la web del festival, es esta, aunque es prácticamente seguro que habrá cambios de aquí a entonces:

  • Patrulla Águila, el grupo de vuelo acrobático del Ejército del Aire y del Espacio Español.
  • PAPEA, la Patrulla Acrobática de Paracaidismo del Ejército del Aire y del Espacio Español.
  • Patrulla Aspa, el grupo de helicópteros de vuelo acrobático del Ejército del Aire y del Espacio Español.
  • Red Arrows, el grupo acrobático de la Royal Air Force británica.
  • Patrouille de France, el equipo de demostración acrobática del Ejército del Aire Francés.
  • Frecce Tricolori, el escuadrón de vuelo acrobático de la Fuerza Aérea Italiana.
  • Patrouille Suisse, el grupo de demostración de vuelo de la Fuerza Aérea Suiza.
  • AV-8B Harrier II Plus de la Armada.
  • Eurofighter Typhoon del Ejercito del Aire y del Espacio
  • F-18 Hornet del Ejercito del Aire y del Espacio

Pero en el vídeo promocional también mencionan o salen un «Botijo» del 43 Grupo de Fuerzas Aéreas; un HAL Tejas Mk2; los dos Aerospatiale Epsilon TB-30 del 101 Escuadrón de la Fuerza Aérea Portuguesa; un helicóptero Airbus H135 P3H de la Armada; un CH-47F Chinook de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra; y una Bücker Bü-131 Jungman y un North American T-6 Texan, dos de los aviones de la colección de la Fundación Infante de Orleáns.

Es fácil ver que en la lista de asistentes tienen especial relevancia las patrullas acrobáticas, pero eso es porque el festival tiene como objetivo conmemorar los 40 años de la creación de la Patrulla Águila.

Y a tenor de este vídeo todo parece indicar que será la última vez que veamos a la Patrulla Águila con sus tradicionales Casa C-101 y la primera que la veamos con los nuevos Pilatus PC-21.

Un par de días de aerotrastorno para no perderse.

Compartir en Flipboard Publicar
PUBLICIDAD